Chica regia en el df
Este fin de semana estuvo super chido. Vino Candy a la ciudad!!!
El viernes nos avisó que venía de visita el fin, así que se organizó todo super rápido. Yo me pude poner en contacto con Nancy que me dio el cel de Candy. El sábado después de despertarme (tempranito, como a las 10 jaja) nos comunicamos y quedamos de vernos en la tarde para comer. Nancy nos dijo que el sábado no podía, así que la única que los vio ese día fui yo.
Ella y Raz estaban en Coyoacán y ahí llegué yo. Comimos en el Sanborns y platicamos de todo un poco para conocernos más (aunque yo ya conocía a Candy x lo que escribe, pero ella no a mi). Los dos me cayeron super bien, y me sentí muy a gusto.
Raz y yo le sugerimos a Candy los dulces que podía comprar y que no se consiguen en Monterrey. Compró palanquetas, alegría (amaranto), gorditas de la villa y no podía faltar una nieve. Después estuvimos dando varias vueltas por la plaza (para Candy fueron demasiadas porque se cansó por la 10ª vuelta jaja). En la vuelta 20 ya los tres nos habíamos cansado y decidimos sentarnos y seguir platicando. Ya como a las 8pm fuimos al Jarocho a tomar un rico cafecito mmm.
Los estragos de la ciudad más contaminada del mundo no podían pasar desapercibidos para Candy y para sus ojitos que no pararon de llorar en la noche. De hecho tuvo que tirar sus lentes de contacto porque veía muy borroso. Espero que ahorita estén mejor sus ojos.
Candy quería conocer todo lo que se pudiera y estar en la calle de parranda, así que Raz nos llevó a un bar llamado… llamado... ashhh no me acuerdo del nombre, que mala memoria tengo. Bueno en ese bar un grupo en vivo toca música de los 60’s, 70’s y 80’s. Nos lanzamos para allá, pero llegamos muy temprano porque ni si quiera habían abierto la puerta principal :S Cuando entramos al bar estaba totalmente vacío, pero después de un rato empezaron a llegar las personas. La banda toca muy bien y estuvo bastante ameno. Yo no me sabía muchas canciones, pero la que sí me sabía la cantaba a todo pulmón. El que si se sabía todas las canciones y no paraba de cantar era Raz (no te estoy diciendo ruco he! jaja) Unas horas después a Candy se le bajó la pila, pues ya llevaba 24 horas despierta y su cuerpo sintió el cansancio acumulado de todo el día (yo también estaba cansada y con sueño). Nos salimos del bar como a las 4am ya para irnos a descansar.
Me dio muchísimo gusto haberlos conocido, me la pasé increíble y mañana les cuento que fue lo que pasó el domingo, porque ahorita tengo que trabajar. Pero si alguien quiere un adelanto aquí lo encuentran narrado por Nancy.
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